10 grandes precursores de la street photography

Ivan Sánchez
 

Llámesele fotografía callejera o street photography, el fuerte impacto que está teniendo en la actualidad esta disciplina podría parecer una moda pasajera si no fuera por las raíces tan sólidas en las que se asienta. Algunos de los fotógrafos más influyentes de la historia contribuyeron con sus aportaciones a definir un género con unos límites muy difusos. Fotógrafos como Henri Cartier-Bresson, Vivian Maier o Garry Winogrand, con su forma de entender la fotografía y su aproximación a la vida cotidiana, hicieron de la street una manera de fotografiar con multitud de planteamientos e infinidad de posibilidades visuales.

1 – Henri Cartier-Bresson (1908–2004)

Uno de los fotógrafos más influyentes de la historia -considerado el padre del fotoperiodismo-, en las imágenes de Cartier-Bresson se advierten muchas de las características inherentes a lastreet photography. Su teoría sobre el momento decisivo es su sello más personal y aporta el elemento de la espontaneidad, clave en el género.

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Aprendiendo de los maestros: Philippe Halsman

Nació el 2 de mayo de 1906 en Riga en el seno de una familia judía y estudió ingeniería en Dresde. En 1928 fue acusado públicamente de parricidio; su padre que tenía por nombre Morduch cayó y murió durante una excursión campestre en los alpes austríacos, sin embargo la gente de los alrededores no dudó en acusarlo de haber cometido asesinato, influidas por su origen judío y del antisemitismo existente y a falta de otras pruebas. Sería llevado a juicio y condenado a cuatro años de cárcel y de no ser por la presión de un destacado grupo de intelectuales, entre los que se encontraban Sigmund Freud, Thomas Mann y Albert Einstein, hubiera pasado entre rejas más tiempo de los dos años que de por sí estuvo. Después se instaló en París donde trabajó como fotógrafo de moda independiente y colaboró en la revista Vogue. En 1940, comenzada la Segunda Guerra Mundial y ante la inminente llegada del ejército alemán marchó a los Estados Unidos con ayuda de Albert Einstein, donde alcanzaría fama mundial, llegando a realizar más de cien portadas para la revista Life. En 1947 obtuvo la nacionalidad estadounidense.
Si por algo se caracterizó Halsman fue por su ingenio, materializado sobre todo a través de la técnica del «jumping style» o «jumpology», a la que él dio origen. Se trataba de retratar a la persona saltando, para así conseguir una imagen de ésta mucho más real, más verdadera, sin artificio ninguno, sin que el cerebro pudiera controlar la expresión del rostro. «En un salto, la máscara se cae. La persona real se hace visible», explicaba Halsman. El resultado era una imagen de la persona bien distinta a como solía aparecer, y por ello con gran atractivo para el público, estas «imágenes de saltos» se publicaron en 1949 alcanzando gran éxito. No todo eran saltos, pero siempre sus fotografías mostraban situaciones divertidas, y algunas, algo provocadoras.

Conociendo a: Tino Soriano

Entrevista de Tino Soriano para PhotoXpeditions


¿Cuándo supiste que querías ser fotógrafo de profesión?

Hubo un momento en el que descubrí que una fotografía es un objeto mágico. Permite mantener la memoria de lo que ya es pasado, justo desde el momento en que se pulsó el disparador. Cuando se fotografía a un niño de diez años de edad, por ejemplo, éste seguirá exactamente igual, será un niño eterno, incluso décadas después de haber muerto de viejo. En este sentido la fotografía preserva la memoria. Luego también tenemos la vertiente experimental. También preserva nuestras experiencias. Una fotografía es un misterio y nosotros estamos ahí para resolverlo. Cada foto es una oportunidad para disfrutar una vivencia excepcional, que es el motor que enriquece nuestras vidas.

¿Quiénes son tus mayores influencias?

Mis influencias has sido los grandes fotógrafos de National Geographic, desde Bruce Dale a David Alan Harvey, mezclada con fotoperiodistas como Eugene Richards, Sebastiao Salgado o Paolo Pelegrin, con toques humanistas extraídos de Elliot Erwitt o Robert Doisneau. Todo ello mezclado con las ganas de vivir la vida como Robert Capa.

¿Qué esperas que la gente vea o sienta cuando miran tus fotografías?

Quiero que expresen emoción, pero también es verdad que no todas las imágenes están tomadas en los momentos álgidos. Si bien este planteamiento es bueno para el fotoperiodismo, En fotografía de viajes lo ideal es que el espectador se sumerja en la realidad que le transmites, a partir de las claves que estás sugiriendo.

En pocas palabras ¿cómo definirías a una buena fotografia?

Alguien que es capaz de hipnotizarme cuando veo lo que está mostrando.

¿Cuál es el trabajo más difícil que has realizado como fotógrafo?

Creo que mi trabajo sobre la medicina, y especialmente sobre el cáncer infantil, sería difícil de repetir. Más que nada porque en la medida que envejeces tu sensibilidad aumenta; lo que es bueno por una parte. Pero también te convierte en un ser más débil.

¿De las fotos que has sacado recientemente, cual es tu favorita?

Acabo de finalizar un encargo para National Geographic y durante el Palio de Siena me atreví a jugármelo todo a cara o cruz. Solo había dos fotógrafos extranjeros acreditados, ya que muy pocos profesionales pueden estar en la pista, pero no quería hacer la foto que todo el mundo hace. Disparé a 1/30 de segundo la salida de los jinetes y el resultado me parece interesante. A ver qué opinan mis editores. Preparé una pequeña presentación

¿Qué pueden esperar los estudiantes del taller de Día de Muertos en Oaxaca, México?

Por la manera de entender el Día de Muertos y por la manera de ser del pueblo mexicano el ambiente que rodea esta celebración es una de las experiencias más interesantes del mundo. Durante una semana tomaremos fotos de festejos, interiores y arquitectura y cada día las revisaremos para ver qué podemos mejorar. Así llegaremos en forma a las dos grandes noches en las que un espectáculo maravilloso estará a nuestra disposición. Es un taller muy completo donde los alumnos realmente no solo mejoran su manera de fotografiar, sino también aprenden a explicar los eventos con originalidad.

Háblame sobre algunas de las técnicas que los estudiantes de este taller tendrán la oportunidad de aprender y de mejorar durante este taller.

Nos enfocaremos especialmente en el uso del color, la composición, aprovechamiento de la luz, confección de una historia e, individualmente, miramos de potenciar las habilidades de cada alumno. No se trata que sean como yo, sino que sean ellos en su mejor vertiente más sugestiva. Otra vertiente muy atractiva es que les enseñaremos a seleccionar mejor su trabajo, con mucho más criterio. Ésta es una de las grandes carencias que tienen los fotógrafos.

¿Hay algo más que quieras compartir con nosotros?

Solo hay un secreto: para tomar buenas fotografías hay que divertirse. Cuando el fotógrafo se divierte, la gente lo aprecia, confía en él y colabora en lo que haga falta. Entonces las fotografías transmiten la emoción, tanto del autor como del modelo. En Oaxaca, durante esta semana, la diversión está garantizada. Eso sí, trabajaremos mucho. Acabaremos agotados, pero terriblemente satisfechos de haber participado en una experiencia como esa.

Eugene Smith: «Yo no escribí las reglas, ¿por qué iba a seguirlas?»

Siéntate y observa…
Fer Gómez
03 de marzo de 2013

La Sociedad Americana de fotógrafos de Media ha descubierto recientemente una entrevista que el retratista Phillippe Halsmann hace a Eugene Smith. Parece ser que tuvo lugar en Nueva York en 1956, pero no se está seguro de la fecha.

Para esta fecha ya había publicado en Life: Country Doctor, Spanish Village y Nurse Midwife. En 1955 dejó Life y pasó a la Agencia Magnum.

Éste es un extracto de esta entrevista:



Velatorio de Juan Larra, Deleitosa, 1951

Recuerdo una de tus fotografías en particular, en un velatorio en España la gente mirando a la cara del hombre muerto, ¿cuántas exposiciones tomaste?

Dos, y una para encender. No queria molestar.

Piero Saporiti, el corresponsal de Time-Life en España me dijo una vez que habías usado lámparas de petróleo…

Saporiti tiene una memoria maravillosa, ¡muy imaginativa! Éste es el tipo de la luz que pude conseguir. Use un sólo flash en lugar de una vela.

La gente estaba muy apenada y pusiste la luz del flash en sus ojos interrumpiendo su dolor. ¿Cómo justificaste esta intromisión?

Creo que no hubiera podido hacer esto sino hubiera estado enfermo el día anterior. Habia estado con dolor de estómago en un campo y vino un desconocido y me ofreció beber vino. No me apetecía pero por no ser descortés a tal amabilidad, acepté. Y al día siguiente, por casualidad, se acercó a mí con prisas y me dijo: “Por favor, mi padre acaba de morir y debemos de enterrarlo, ¿podría llevarme al lugar donde tengo que rellenar todos los papeles?” Fuí con él a su casa, yo estaba muy conmocionado por el dolor y la belleza compasionada del velatorio, cuando vi que venia hacía la puerta me acerque a él y le dije: “Por favor, señor, no quiero deshonrarle en estos momentos, pero ¿podría hacer fotografías?” y me respondió: “Sería un honor”.




No creo que tomar una fotografía por el valor de la fotografía en sí misma esté justificado, solamente cuando consideras que es el objetivo. Por ejemplo, fotografié una mujer dando a luz para una historia de comadronas. Pero hay por lo menos dos vacíos de magnificas fotografías en mi obra. Una es en Filipinas, una mujer que tenia problemas con el parto en un pueblo que había sido destrozado por nuestros bombardeos. La mujer estaba dando a luz y mi único pensamiento en aquel momento era ayudarla. Si hubiera habido allí otra persona tan competente como era yo entonces para ayudarla habría tomado la fotografía. Pero, quedarme quieto ante una circunstancia así… ¡No hay una maldita fotografía tan valiosa!

Recuerdo una foto de una mujer española arrojando agua en la calle. ¿Fue una puesta en escena?

No hubiese dudado en pedirle que tirase el agua. No me importa montar una escena si creo que va a intensificar algo que es totalmente auténtico del lugar.

Cartier-Bresson nunca pregunta esto. ¿Por qué romper una regla básica de la fotografía?

Yo no escribí las reglas, ¿por qué iba a seguirlas? Dedico mucho tiempo e investigación en saber lo que quiero tratar. Pregunto y lo arreglo cuando siento que es legítimo. La honestidad recae en mi capacidad, como fotógrafo, para comprender.





Extraído de una entrada del blog del New York Times Lens

Cultura fotográfica: El pictorialismo

queaprendemoshoy.com
Francisco Ledesma Brito (texto del artículo)
27 de enero de 2012
Gertrude Käsebier

Cuando hay una exposición sobre el Pictorialismo en un museo, sabes que son fotografías lo que ahí se exponen, pero algo no cuadra. Te acercas a las obras y no parecen fotografías, ves efectos más propios de la pintura y eso te hace ir a leer la cartela con desconcierto; sí son fotos, pero no lo parecen.
En eso consiste básicamente el Pictorialismo, el cual se considera la primera corriente artística dentro del mundo de la fotografía, pero que, paradójicamente, busca su inspiración y sus intenciones estéticas fuera del mundo de la fotografía.

Gertrude Käsebier

Este movimiento tiene sus orígenes en la década de los sesenta del siglo XIX, aunque adquirió su máxima repercusión a partir de los ochenta y prolongándose hasta la I Guerra Mundial (1914-1918), cuando ya dejó paso a otras corrientes más modernas. Básicamente consiste en emparentar a la fotografía con la pintura, tratando los mismos temas y recurriendo a la misma estética, dejando la parte propiamente técnica de la fotografía en un segundo lugar. Para conseguir sus objetivos desenfocaban la imagen, añadían multitud de filtros, marcas, suciedades… creando imágenes únicas en las que la intervención humana en el proceso de revelado era fundamental. Los resultados eran imágenes únicas e irrepetibles, llegando incluso a destruir los negativos para no sacar más copias; dichas obras se enmarcaban como si de un cuadro se tratase y se colgaban en los salones de la pujante burguesía decimonónica.

Alfred Stieglitz

Alfred Stieglitz

Alfred Stieglitz

Algunos de los temas más recurrentes serán los paisajes en días de lluvia o con niebla; las alegorías cargadas de un fuerte contenido moral o escenas mitológicas. Las mujeres tienen un papel fundamental, apareciendo modelos que en sus posturas, en sus gestos y en su aspecto se identifican con las tomadas por los pintores contemporáneos a estos fotógrafos.

Julia Margaret Cameron

Julia Margaret Cameron

  

Julia Margaret Cameron

Julia Margaret Cameron

Algunos de los personajes más relevantes de este movimiento fueron Julia Margaret Cameron o Henry Peach Robinson, que crearan bellas imágenes en las que la fotografía sirve de medio para crear obras que la niegan y que pretenden trascender del mero mecanicismo de este nuevo invento. Muchos serán los que consideren este movimiento fuera de las corrientes de la fotografía, ya que en sus planteamientos de base se alejan de los fundamentos de la misma.
Se llegaron a crear incluso grupos de fotógrafos que se adscribieron a esta corriente, como el Camera Club de Viena en 1891 o la Linked Ring Brotherhood de Londres al año siguiente, que organiza exposiciones con obras de fotógrafos de toda Europa y EE.UU., pues esta estética se había extendido rápidamente por el panorama internacional. El ya mencionado Peach Robinson incluso llegó a publicar obras donde se recogían los presupuestos teóricos de dicho movimiento, dándole al mismo visos de gran corriente pictórica de vanguardia, al dotar a los pictorialistas de una guía y un corpus ideológico fundamentales; esto lo podemos ver en obras como Pictorial Effect in Photography (1869) o Picture- making by Photography (1884).

Henry Peach Robinson

Henry Peach Robinson

Henry Peach Robinson

Henry Peach Robinson

Henry Peach Robinson

El movimiento dio sus últimos estertores cuando, ya en el siglo XX, en la fotografía primaba más lo directo, lo impactante, lo que se convirtiera en noticia, que llegara al espectador y que lo moviera socialmente, pero lejos de ese diletantismo ya pasado de moda de los grandes caballeros del XIX.

Léonard Misonne

Léonard Misonne

Léonard Misonne

Léonard Misonne

Léonard Misonne

Léonard Misonne

Robert Demachy

Robert Demachy

Robert Demachy

Robert Demachy

Para profundizar en el tema de la fotografía pictorialista recomiendo la lectura del libro «Camera Work» de Alfred Stieglitz, publicado en la editorial Taschen. Toda una delicia, y encima a un precio muy atractivo.
José Joaquín Pérez Soriano
«Este libro se convertirá en una de las obras obligatorias de la década. Ninguna biblioteca fotográfica estará completa sin él.»

mono, Londres, Reino Unido

La mirada fotográfica de: Abbas Attar

Abbas Attar es un fotógrafo iraní integrante de Magnun Photos desde 1981. Según su perfil en Magnun: “Un iraní trasplantado a París, Abbas dedicó inicialmente su trabajo a documentar la vida política y cotidiana de las sociedades en conflicto como Biafra, Vietnam, Sudáfrica durante el Apartheid y la Revolución en Irán. Luego hizo varios ensayos sobre el Islam, el Cristianismo y el Paganismo, en los que trabajó varios años. Actualmente se encuentra examinando cómo la religión está reemplazando a la ideología política como motor de los conflictos internacionales.”